Casinos con dinero real en 2019: ¿se pueden usar con seguridad?
Quienes le conocían en el colegio donde estudió, coinciden en que se trataba de un alumno tranquilo, callado e introvertido. Se casó a los veintidós años con Mónica Cisternas, oriunda de La Caleray tuvieron dos hijas. Luego, convivió cinco años con Marianela Vergara, quien ya tenía otras dos hijas. Con ella regresó a Puchuncaví y cosechó fama de buen esposo. A mediados de los años emigró a Iquique buscando mejores oportunidades de trabajo. Comenzó cargando sacos de sal. En una fiesta conoció a Nancy Boero, catorce años mayor que él y madre de seis hijos. Al poco tiempo, dejó su trabajo para iniciarse como taxista en forma ilegal. Fue entonces cuando comenzó su seguidilla de crímenes, todos de similares características.